Así es el putero español: “El sexo es de pago pero el matrimonio sale más caro”
El problema es que esas condiciones no existen Un cliente posa junto a dos bailarinas durante un show de striptease. Un consumo que ya era de por sí elevado teniendo en cuenta que, como explica Gómez, somos un país en que apenas ha habido una educación afectivo-sexual que criticara la relación de explotación que existe cuando un hombre paga por tener sexo con una mujer. Te impresiona cuando vas a los clubs y ves la gente que hay, abarcando toda la oferta. En su opinión, los clientes pueden dividirse en cuatro grandes grupos con un tipo de discurso similar en cuanto a la prostitución.
Un retrato del putero español
Bebedero de la imagen, Getty Images Abecé de foto, Los expertos no se ponen de acuerdo en si la adicción al sexo se trata de un mito o una enfermedad experimental. Como sociedad, aceptamos que existe la adicción a sustancias como la tóxico, el alcohol y otras drogas. Bebedero de la imagen, Getty Images Meat pie de foto, Un estudio de mostró que la actividad cerebral en los adictos al sexo cuando miran pornografía es similar a la de los adictos a la droga, cuando se les muestra su droga preferida. Empero ahora, se ha propuesto la introducción del término comportamiento sexual compulsivo en la Clasificación Internacional de Enfermedades, el manual producido por la Organización Ecuménico de la Salud. La inclusión de la adicción al juego fue considerada en el pasado en la categoría de comportamientos compulsivos, pero obtuvo el estatus formal de diagnóstico como anexión en junto con el llamado trastorno por atracón, después de que surgiera nueva evidencia. Terapeutas creen que la adicción al sexo puede seguir el mismo camino.