Juguetes para romper los estereotipos de género

Niña en español – 696457

No es cierto que la mujer esté actualmente encerrada en casa y no tenga otra ocupación profesional. No es cierto que los hombres no cambien pañales o no den de comer. El hecho de que los medios de comunicación, la publicidad o los cuentos infantiles sigan dando una imagen del pasado es algo ante lo que poco o nada podemos hacer, tan sólo no comprar o no mirar. Pero de los juguetes que compramos hoy, somos totalmente responsables. Tampoco podemos olvidar que si las niñas sufren las consecuencias de unos estereotipos que acortan y limitan sus potencialidades, los niños sufren las exigencias impuestas por la sociedad a los 'machos', que en muchas ocasiones pueden ser asfixiantes y originar complejos.

Convencionalismos aparte

Javier Jiménez dronte Padres preocupados porque sus hijos juegan con muñecas o sus hijas juegan con juguetes de actividad y no saben cómo manejarlo. Y no necesariamente por homofobia o incomprensión, sino porque genuínamente los padres denial saben qué hacer. No importa qué juguetes les compremos, ni a qué juegos les enseñemos a jugar. Las preferencias que desarrollamos a los cuatro o cinco años, independientemente de las acciones de los padres, son las que predicen la orientación sexual en la vida adulta. Convencionalismos aparte Foto: Kelly Sikkema Unsplash Las investigaciones que tenemos nos dicen que homosexuales y heterosexuales difieren en el tipo de juguetes con los que jugaban de niños. Los niños no juegan, aprenden. O, mejor dicho, para ellos el juego es la vía por la que descubren el mundo. Por eso es razonable pensar que si la orientación sexual se define pronto, tenga un impacto en la vida diaria.