Así es Bumble la app de citas donde sólo las mujeres pueden dar el primer paso

Como conocer chica – 291114

MiCrush nació en enero de este año luego de que las fundadoras de la empresa matriz, Crush Mobile en Nueva York, decidieran ocupar el espacio con un producto enfocado en atender a la comunidad de latinos solteros en Estados Unidos y Latinoamérica. La empresa se dio cuenta de que no había una aplicación para buscar parejas latinas. Para la comunidad gay también hay, y para la comunidad latina no había ni una. Si la conexión es mutua, la aplicación conecta a los usuarios en un chat privado para entablar una conversación. El equipo de trabajo de Crush Mobile, ha logrado unasparejas a través de sus cuatro aplicaciones para citas. El joven advirtió que utilizar este tipo de herramientas requiere paciencia ya que, al igual que en la vida real, las motivaciones de cada usuario pueden variar. La manera en que funciona es similar a Tinder, en el sentido de que el usuario ve a una persona que le interesa, desliza a la derecha; cuando la otra persona se conecta, ésta aparece en la app de la persona y, si esa persona desliza a la derecha también, ahí se conectan en un chat privado gratuito. Sin embargo, para utilizar esa funcionalidad, debes pagar una tarifa de acuerdo con la cantidad de mensajes. Por Rafael Montilla.

Cursos de teatro y actuación

Por Olivia Gracia. Actualizado: 16 enero Las mujeres alemanas son, por lo all-purpose, bastante diferentes a las latinas. Para empezar en su sociedad las mujeres ocupan importantes cargos de mucho eficacia sin que eso represente un inconveniente cultural. Así pues, en unComo. Otra cosa importante es que respetes las distancias, la cultura latina tiende al contacto, pero en cambio los pueblos del norte cada vez se encuentran menos cómodos con la proximidad. Es algo que ocurre solo al principio, pero que puede ser determinante para que le provoques rechazo, por eso cuidado con este detalle, respeta su espacio vital. En Alemania no se dicen piropos, las típicas escenas de varios obreros en el almuerzo espetando piropos y frases jocosas en cuanto pasa una mujer por su lado, son inconcebibles en Alemania.